Soy Antonia Céspedes, soy gerente de Imaxinatea y mi experiencia se ha forjado a través de la práctica teatral. En estos primeros Post, profundizaremos en la importancia de la práctica y formación teatral en todas las etapas de la vida:
“A través del teatro podemos ver reflejada la vida, las pasiones, los destinos humanos, los aconteceres de una época y las costumbres de las diferentes civilizaciones”
El Teatro es una herramienta válida en la formación de la conciencia de las personas y de los pueblos. Para eso, en la niñez y en la adolescencia, etapa en la que el ser humano crea su base para lo futuro, las clases de teatro ofrecen recursos muy valiosos y desconocidos y en la etapa adulta ayuda a redescubrirse a sí mismo
En mi experiencia personal como animadora teatral en el ámbito de la enseñanza teatral no formal, pude observar como la práctica teatral, tiene la capacidad de transformar a las personas, sin importar la edad.
A lo largo de estos años en mis clases de teatro, comprobé como alumnos y alumnas provenientes de diferentes profesiones, niveles culturales y niveles socio-económicos, encontraban en el teatro una nueva perspectiva de vida, otras vías de comunicación desconocidas hasta ese momento. Observamos, cómo en algunos casos, la práctica teatral llegó a transformar sus vidas por completo.
“O teatro constitúe dende o inicio dos tempos un espazo máxico no que é posible o encontro, a expresión e a comunicación, pois permite crear unha especie de espazo transicional, onde todo se pode dar, mesmo a aprendizaxe e a terapia. O teatro constitúe un instrumento educativo cunhas potencialidades aínda por explorar, e múltiples informes fundamentan e avalan a súa necesidade; as moi variadas experiencias desenvolvidas en diversos países mostran que tanto a asistencia a espectáculos teatrais como a propia práctica do teatro promoven aprendizaxes que ningunha outra área pode suscitar” (Vieites, 1997).